11. Los doce son las piedras del pectoral
celestial de Jesús.
El
pectoral del sumo sacerdote del Israel del antiguo testamento, aunque es
perecedero y terrenal, no fue creado al azar, sino que fue tomado de un modelo
eterno ya existente en el Cielo, en el Israel espiritual. (Sobre que a moisés
le mostraron unos modelos: Éxodo 25:40, 26:30. Números 8:4). El pectoral terrenal es semejanza de un
pectoral supuestamente eterno. Es un pectoral con doce piedras preciosas
talladas e incrustadas en un efod.
No
es hecho de doce piedras cualquieras, sino que todas son piedras preciosas
diferentes y llamadas por sus nombres propios, tal cual son los doce apóstoles
de Jesús. No se podía quitar una de esas gemas y poner otra clase de gema en su
lugar. Cada gema tenía su nombre. Tampoco son doce piedras preciosas, pero en
bruto, sin tallar y sin pulir, sino que son doce gemas talladas, enseñadas por
Jesús durante tres años, e inspirados por el Espíritu de Jesús.
Por
eso el sumo sacerdote terrenal, debía llevar un pectoral alrededor de su pecho,
donde reside su espíritu, como lleva por toda la eternidad su pectoral de los
doce apóstoles, el sumo sacerdote, Jesús de Nazaret. El pectoral de Jesús no es
Jesús, sino que el pectoral de doce piedras preciosas está a su alrededor. Los
doce apóstoles de Jesús no son Jesús, pero son los doce que fueron elegidos
desde la eternidad para que lo rodearan a Él.
El
pectoral del sumo sacerdote Jesús, es el mismo muro de la nueva Jerusalén,
porque la ciudad de la nueva Jerusalén es el cordero. No hay trece piedras en
el pectoral, ni hay trece cimientos en el muro de la nueva Jerusalén, ni Pablo
es del número de los doce apóstoles de Jesús, ni fue enseñado por Jesús, ni fue
inspirado por el Espíritu de Jesús en todas sus enseñanzas.
En
el pectoral espiritual del sumo sacerdote, Jesús, el pectoral de doce gemas,
están los nombres de los doce apóstoles de Jesús, pero no se lee el nombre de
Pablo. Si el nombre de Pablo no está en ese muro de la nueva Jerusalén, mucho
menos está en ese pectoral.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario